El
Postimpresionismo es
un término histórico-artístico que se aplica a los estilos pictóricos de
finales del siglo XIX y principios del siglo XX posteriores al impresionismo. Fue acuñado por el crítico británico Roger Fry con motivo de una exposición de pinturas
de Paul Cézanne, Paul Gauguin y Vincent van Gogh que se celebró en Londres en el año 1910. Este término engloba en realidad diversos
estilos personales planteándolos como una extensión del impresionismo y a la
vez como un rechazo a las limitaciones de este. Los postimpresionistas
continuaron utilizando colores vivos, una aplicación compacta de la pintura,
pinceladas distinguibles y temas de la vida real, pero intentaron llevar más
emoción y expresión a su pintura. Aunque los postimpresionistas basaron su obra
en el uso del color experimentado por los impresionistas, reaccionaron contra
el deseo de reflejar fielmente la naturaleza y presentaron una visión más
subjetiva del mundo.
Los pintores
postimpresionistas
Paul Gauguin. Se inicia en el impresionismo con Pissarro; deja una vida confortable, familia, mujer e hijos y se instala pobremente en París y Bretaña y después se traslada a Tahití, donde pinta sus series de mujeres tahitianas. Destaca por el uso tan expresivo que hace del color con tonos fuertes, vivos y muchas veces arbitrarios que dispone en grandes planos delimitados por ritmos lineales curvos. Tiene dos temas preferentes: el mundo exótico de Tahití y el "primitivismo" de Bretaña. Su obra es preferente del simbolismo y su sentido del color influirá en los fauvistas y expresionistas. Renuncia a la perspectiva, suprime el modelado y las sombras e identifica la sensación de plano igual que en las pinturas japonesas.
Paul Cézanne. En su pintura se recupera el volumen gracias a la geometría, el dibujo y la definición de las formas mediante pinceladas que han sido llamadas constructivas; todo esto sin renunciar al color de gran intensidad mediante los contrastes y las sombras coloreadas. En sus cuadros se potencia el primer plano y realiza pequeñas distorsiones fruto de la utilización de más de un punto de vista (bodegones). Su pintura es el punto de arranque del cubismo y ha influido en coloristas como Matisse. Una de las obras del artista es Los jugadores de cartas.
Paul Gauguin. Se inicia en el impresionismo con Pissarro; deja una vida confortable, familia, mujer e hijos y se instala pobremente en París y Bretaña y después se traslada a Tahití, donde pinta sus series de mujeres tahitianas. Destaca por el uso tan expresivo que hace del color con tonos fuertes, vivos y muchas veces arbitrarios que dispone en grandes planos delimitados por ritmos lineales curvos. Tiene dos temas preferentes: el mundo exótico de Tahití y el "primitivismo" de Bretaña. Su obra es preferente del simbolismo y su sentido del color influirá en los fauvistas y expresionistas. Renuncia a la perspectiva, suprime el modelado y las sombras e identifica la sensación de plano igual que en las pinturas japonesas.
Paul Cézanne. En su pintura se recupera el volumen gracias a la geometría, el dibujo y la definición de las formas mediante pinceladas que han sido llamadas constructivas; todo esto sin renunciar al color de gran intensidad mediante los contrastes y las sombras coloreadas. En sus cuadros se potencia el primer plano y realiza pequeñas distorsiones fruto de la utilización de más de un punto de vista (bodegones). Su pintura es el punto de arranque del cubismo y ha influido en coloristas como Matisse. Una de las obras del artista es Los jugadores de cartas.
Van Gogh. Se establece en Arlés entusiasmado por la luz de la Provenza pinta figuras y paisajes de formas serpenteantes y flamígeras que traducen su fuego interior. Es un apasionado del color como vehículo para expresar las frecuentes depresiones y angustias que padeció. Su pincelada es muy característica, sinuosa, cursiva y espesa; los colores son a veces agresivos con contrastes no frecuentes- amarillo sobre naranja-. Abre las puertas al expresionismo del XX. Una obra del artista representativa del movimiento es La noche estrellada.
En la obra podemos observar una gran mancha que ocupa casi todo el alto de la obra, la cual su color predominante es el negro. Luego se encuentra el cielo, el cual podemos deducir que es de noche por sus tonos de azules, este posee tambien estrellas con distintos tonos de amarillos. En la superficie inferior derecha vemos las líneas curvas que desde un punto de vista subjetivo, reprensentan montañas y más abajo una ciudad con casas y una iglesia. Es de destacar el tratamiento de la luz de las estrellas como puntas de luz envueltas en un halo luminoso a su alrededor, obtenido con una de las pinceladas más personales de la histora de la pintura: un trazo a base de espirales que dominan el cielo y los cipreses de primer plano, tomando como inspiracion a Seurat y la estampa japonesa.
Toulouse-Lautrec. Nos refleja el
ambiente de los salones nocturnos: bailarinas, cantantes y prostitutas son sus
modelos. En su técnica el dibujo, la captación del movimiento y la carga
irónica y caricaturesca es esencial. Fue el impulsor del cartel. En sus obras,
destaca: Moulin Rouge.
Fuentes de información:
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